miércoles, 9 de marzo de 2011

La (otra) crónica del 8 de marzo

Prometí una crónica y aquí estoy, después de un día agotador de promoción en Valencia, escribiendo desde un hotel de Madrid. Pero lo prometido...
El 8 de marzo era el día previsto para la salida de la novela, y Planeta decidió celebrarlo llevando de excursión a los periodistas y a los libreros por la Barcelona del libro. La cosa empezó en la confitería Escribà, de les Rambles, donde se sirvió un desayuno (que yo no pude ni catar, claro). Contesté algunas entrevistas, fresca aún como una lechuga. Víctor, de La Razón, para la contra (se ha publicado hoy) y los informativos de Antena 3 de los que hoy mi madre hablaba muy orgullosa, porque casi se le saltan las lágrimas de ver a Matías Prats hablar de Habitaciones cerradas como si hubiera leído el primer borrador. Si tenéis curiosidad, podéis ver el vídeo AQUÍ:

El trabajo de los chicos de Antena 3 tuvo su propia anécdota, porque cuando lo tenían todo montado en mitad de las Ramblas, la policía municipal les hizo desmontar las dos sillas alegando que para grabar en la vía pública hacía falta un permiso. Inmortalicé de esta manera el intercambio de opiniones: 


Acto seguido, y en pausada procesión, emprendimos la peregrinación hacia el autobús, que nos esperaba en Colón. He aquí parte de la multitud. La primera nuca es la de Sergi Dòria, de ABC.


Nuestro simpático y aturullado chófer:


Tenía todo un aire de excursión del cole tan estupendo que daban ganas de cantar aquello de "Una sardina, una sardina, dos sardinas, dos sardinas...". Pero hice lo que me pedían las chicas de prensa de Planeta (qué mandonas): agarrar el libro como si lo llevara pegado con cola a la mano y hablar de mi libro. Obedecer no se me da mal...



El Santet del cementerio de Poblenou no había estado nunca tan concurrido. Todos pidieron su deseo (dicen que nunca falla).


Me gustaría saber qué pidió Miriam Vall, mi flamante editora. ¿De qué tiene cara?


Montse, de Televisión Española, y el Santet chupando cámara. Parezco muy feliz (y lo estaba), pero hacía un frrrrrío de impresión. Y yo con mi gabardina Marina Rinaldi, comprada para la ocasión, tan congelada como mona (¿o puede que más?).


De tanto llevar mi libro en la mano, con el título bien visible y la cubierta hacia fuera, se me puso esta cara de cuchufleta:


Después del paseo, ¡a comer!, que nos lo habíamos ganado. Los personajes de la novela nos recibieron. Aquí, luzco anonadada junto a Amadeo Lax provecto:


Me encanta hacer fotos a los fotógrafos. He aquí los periodistas gráficos haciendo las fotos que han salido hoy hasta en la sopa:


La modelo parecía petrificada. ¡Qué profesionalidad! Y me temo que el actor que debía pintar no tenía mucha mano... pero estuvieron fantásticos. Y muy decimonónicos, a pesar de su juventud. Y yo haciendo caso: sin soltar el libro ni para hacer pipí.


Yo no comí mucho pero, la verdad, tampoco me entraba nada. En cambio, hablé por los codos. He aquí un detalle de la comilona en Les Set Portes, otro escenario de la novela. Hubo pà amb tomàquet, escalivada, arroz y crema catalana. Maria del Roser Golorons hubiera estado orgullosa de lo bien que saben recibir a las visitas estas chicas editoras.


La verdad es que me veo en esta foto muy bien flanqueada: Berta Bruna, Sandra Bruna, Miriam Vall, Laura Franch... ¡menudo poker de damas!

Y colorín colorado, esta (otra) crónica se ha acabado. Pero seguiremos informando.

1 comentario:

  1. Muchas gracias por la crónica Care, que emoción, verte esa carita sonriente, con el libro siempre contigo, y el video, de antena 3, con Matias hablando de la novela...
    No me extraña que tu madre esté orgullosa y emocionada, no es para menos!!!

    Seguiré atenta a neuvas crónicas o noticias, mientras tanto a disfrutar!!

    Un abrazo enorme!

    Rebeca.

    ResponderEliminar